Fuentes ligadas al Gobierno Nacional afirmaron que a partir del mes de noviembre, desaparecerán las limitaciones en el cupo de pasajeros que ingresan al país desde el exterior, medida que hasta hoy funcionaba con renovaciones mensuales que iban incrementando gradualmente la cantidad de ingresos.
“El 1º de noviembre las fronteras se abren para todo el mundo”, aseguró el lunes pasado la Directora Nacional de Migraciones, Florencia Carignano, Los requisitos, dijo, serán los mismos que para los turistas de países limítrofes, a saber: deberán certificar esquema de vacunación completo con fecha de última aplicación por lo menos 14 días antes del ingreso al país, presentar un test PCR negativo hecho en las 72 horas previas al embarque o un test de detección de antígenos en el corredor seguro de entrada a la Argentina y deberán realizar un segundo test PCR entre el quinto y séptimo día de estadía en el país. Quienes cumplimenten estos requisitos quedarán exentos de realizar una cuarentena.
Sin embargo, de acuerdo con el Ministerio de Salud, aquellas personas que al arribar a la Argentina no presenten un esquema de vacunación completo, incluyendo a los menores de edad, también podrán ingresar pero deberán realizar una cuarentena obligatoria, test de antígenos al ingreso y el PCR entre el quinto y séptimo día.
A través de una conferencia de prensa realizada la semana pasada, la ministra de Salud Carla Vizzotti y el jefe de Gabinete Juan Manzur anunciaron que cuando el país alcance el 50% de la población completamente vacunada, se dejará de realizar el test de detección de antígenos al ingreso al país -excepto a las personas no vacunadas- y de exigir el PCR entre el quinto y séptimo día de estadía. Con esa proporción de vacunados “se minimiza el impacto del aumento de hospitalizaciones y muertes”, remarcaron desde la cartera sanitaria.