La decisión se produce tras un reempadronamiento realizado en septiembre.
El Gobierno anunció que, a partir de octubre, los beneficiarios del Monotributo Social deberán asumir el 50% del costo de su obra social, tanto para ellos como para cada adherente que incorporen. Esta medida fue confirmada mediante la Resolución 630/2024, publicada este martes en el Boletín Oficial, y forma parte de una serie de cambios en el régimen que busca reestructurar las políticas sociales.
La decisión se produce tras un reempadronamiento realizado en septiembre para los beneficiarios del Monotributo Social que participan en los programas Acompañamiento Social, Volver al Trabajo y Microcrédito. El Ministerio de Capital Humano, liderado por Sandra Pettovello, argumentó que esta nueva normativa implica un aumento en los costos para aquellos que opten por continuar en esta categoría tributaria.
El texto oficial establece que los titulares que deseen permanecer en el Monotributo Social deberán abonar el 50% del componente de la obra social, quedando exentos de pagar el importe integrado y computándose los aportes regulares para la Prestación Básica Universal del Sistema Integrado Previsional Argentino. Además, se derogaron dos resoluciones anteriores que regulaban la asistencia estatal a los monotributistas sociales, argumentando que no habían cumplido con sus objetivos y generaban un gasto que podría ser destinado a políticas públicas más efectivas.
El Gobierno justificó esta medida al señalar que el número de personas en la economía informal ha aumentado y que no hay evidencia que demuestre que contar con un monotributo social mejora la sostenibilidad de los emprendimientos financiados. Con esta reestructuración, el Estado busca optimizar el uso de los recursos disponibles y maximizar el impacto de las políticas sociales.