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Los precios de alimentos subieron 4 veces más en la Argentina que en la región

Señala que en otros países también influyó el conflicto Rusia Ucrania y la pandemia, pero la inflación de alimentos fue más baja.

“Suben los precios de los alimentos en toda la región, pero van por la escalera en los países vecinos y por el ascensor en Argentina”.

El economista Juan Manuel Garzón, del Instituto de Estudios sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana (Ieral) de la Fundación Mediterránea describió de esta forma lo que sucedió en el primer cuatrimestre con el precio de los alimentos en un análisis al que accedió EL LIBERAL.

Destacó que “los alimentos en la Argentina aumentaron cuatro veces más que en la región. En el primer cuatrimestre del año, los precios de la canasta de alimentos y bebidas aumentaron más del cuádruple que en el resto de América Latina“.

El análisis del analista señala que “según el relevamiento periódico que realiza FAO (Naciones Unidas) el valor internacional de una canasta de alimentos (que contiene un mix de productos que incluyen principales carnes, lácteos, aceites, granos y azúcar) se viene incrementando al 3,3% mensual en los cinco primeros meses del 2022”.

Puntualizó que “se trata de una fuerte suba de precios que excede largamente la observada durante los dos años previos (+1,7% mes en 2021 y +0,6% mes en 2020). Dentro de la canasta FAO, los precios de todos los productos están yendo más rápido (con excepción del azúcar), destacando por sobre el resto los aceites (+5,1% mes) y los cereales (+4,3% mes)”.

Destacó que “esta revalorización de las materias primas y su consecuente presión sobre los precios de los alimentos se monta sobre un escenario de por si complejo en materia inflacionaria, en el que los países están lidiando con las consecuencias de las políticas expansivas aplicadas para contener la crisis económica generada por la Pandemia Covid-19“.

Además, “la invasión de Rusia a Ucrania generó presiones alcistas en los precios internacionales de energías, commodities y materias primas agropecuarias, impactando de lleno en la canasta de alimentos. En todos los países de la región, la inflación en alimentos y bebidas excede a la general”.

Realidad diferente

No obstante, Garzón afirmó que en el caso de la Argentina, “no sólo no escapa de esta realidad, sino que la expone con crudeza, mostrando una gran aceleración de precios. En el caso de los alimentos y bebidas, la inflación local, que promediara el 3,5% mensual en el 2021, ha subido al 6,4% mensual en primer cuatrimestre 2022 (IPC Indec Nacional), mientras que en Latinoamérica (10 países), la inflación (mismo rubro y período) pasó del 0,6% al 1,4% mensual”.

El economista concluyó que “a nivel local son los factores internos los que agravan la tensión sobre precios que genera un contexto externo favorable para un país exportador neto de commodities: una base de inflación ya muy elevada y debilidades múltiples en prácticamente todos los frentes, tanto en los planos fiscal (gasto público que crece en términos reales, déficit primario, riesgo país muy elevado), monetario (agregados creciendo por encima del 50% interanual) o cambiario (aceleración de la tasa de devaluación, en un mercado desdoblado, con restricciones múltiples, que genera distorsiones y malos incentivos), como a la evidente dificultad que enfrenta la coalición de gobierno, debilitada políticamente y en disgregación, de aplicar con cierta chance de éxito un programa de estabilización”.