Esta acción forma parte de políticas estatales para combatir el delito y cuidar el ambiente, liberando espacios y reduciendo el impacto ambiental.
“Lo que se pudo reutilizar, lo hicimos; y los vehículos en buen estado, los subastamos, lo que implica una forma de golpear a las organizaciones criminales en su poder económico”, agregó Matías Figueroa Escauriza.
Los vehículos estaban depositados en el predio de la APRAD y fueron compactados tras un relevamiento que determinó su estado.