Luego de la caótica sesión del jueves que la oposición obligó a suspender, el proyecto vuelve al recinto con los votos garantizados. Habrá nuevamente protestas en las afueras del Congreso.
Esta tarde, desde las 14, Cambiemos logrará lo que no pudo el jueves: habrá al menos 129 diputados sentados en su banca para debatir la reforma previsional que impulsa el Gobierno y que ya tiene media sanción en el Senado. Aunque luego de la reunión del viernes con los gobernadores y legisladores de la oposición también estaría garantizada la aprobación del proyecto, muchos dentro del oficialismo muestran cautela ya que piensan que las protestas convocadas y el paro de la CGT podría -nuevamente- convulsionar la sesión y “espantar” a algunos bloques.
A pesar de esto, hay un optimismo que se alimenta por la necesidad de las provincias de cumplir el Pacto Fiscal, lo que le daría a Cambiemos al menos 25 de los 35 votos de Argentina Federal, la bancada que representa a los gobernadores, que demostraron ser, por lo menos para esta ley, claves para las aspiraciones de la Casa Rosada.
Según los cálculos dentro del oficialismo, cuentan con 140 diputados para el quórum y 135 votos positivos de mínima para aprobar la norma.
Los incidentes que puedan ocurrir fuera de la Cámara es lo que más preocupa al Ejecutivo. Sin embargo, el jefe del interbloque de Cambiemos, Mario Negri, ya dejó en clara su postura: “Si la CGT convoca a un paro antes de la reunión del Congreso, no hay dudas que están buscando debilitar las instituciones. La ley importa pero golpear al Presidente les produce adrenalina nostálgica”.