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El Gobierno evalúa la fase de “reapertura progresiva” con restricciones locales y protocolos por actividad

El presidente Alberto Fernández se refirió hoy a los planteos de economistas, empresarios y dirigentes políticos que en los últimos días pidieron una salida de la cuarentena más veloz debido al fuerte impacto que las medidas contra el coronavirus generaron en el mecanismo económico, financiero y laboral del país.

Fernández, no obstante, advirtió que no habría todavía un regreso a la normalidad y reconoció la complejidad que tiene flexibilizar el confinamiento general. “Los que dicen que hay que salir de la cuarentena ya, sepan que salir en los términos que ellos reclaman es llevar a la muerte a miles de argentinos. Es muy difícil dosificar la salida”, admitió.

Atento a que están dadas las condiciones epidemiológicas para pasar a la siguiente fase, el Gobierno avanzó en las últimas horas en dos planos: un análisis de los centros urbanos del país y un estudio de posibles protocolos sanitarios para los distintos sectores de la economía.

Así, mientras que en la fase en curso de la cuarentena la Nación estipuló un criterio general para todas las aglomeraciones urbanas del país de más de 500.000 habitantes, para la siguiente etapa no se descarta que existan protocolos diferenciados por región. Se pasaría al esquema de “restricciones locales”.

Por un lado, el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, y el ministro del Interior, Eduardo “Wado” De Pedro, vienen llamando por teléfono a los gobernadores -sobre todo los que tienen en sus territorios grandes conglomerados urbanos o los que enfrentan situaciones epidemiológicas más comprometidas- para hacer una evaluación provincia por provincia.

“La idea es que haya esquemas acordados con cada provincia, con particularidades locales. No a todas las ciudades les cabe la misma situación. No es lo mismo la Capital Federal que Salta”, ejemplifica un colaborador de la Casa Rosada.

Por otro lado, Fernández anticipó que elabora protocolos específicos por rama de la actividad.”Estamos trabajando con Ginés [González García], Santiago [Cafiero] y Wado [De Pedro] en protocolos para una serie de actividades. Contemplan como condiciones evitar el uso del transporte público y los traslados interjurisdiccionales, y poner pautas sanitarias, como el control de la temperatura (de los empleados) “, dijo el Presidente en Radio con Vos. Agregó que también está en desarrollo una aplicación de celulares para que cada persona pueda hacer un autotesteo de posibles síntomas de coronavirus.

La gran preocupación del Gobierno sigue siendo el transporte público, el vector que hizo crecer la curva de contagios en muchas ciudades del mundo. Por eso, en la Casa Rosada hoy deslizaban que una de las alternativas que se evalúan es la de estipular, además, franjas horarias para las distintas actividades, de modo de controlar el flujo en las horas pico.

En el Gobierno aseguran que habrá muchas restricciones que seguirán en pie, como las clases, o la prohibición de eventos masivos. Las salidas recreativas, en cambio, siguen siendo un interrogante, cuando se registra un mayor agobio por el aislamiento extendido.

Aunque quiere avanzar en la salida, Fernández sostiene un pie arriba del freno. “Si pretendemos que se levante todo, nos podemos meter en un problemón. Hay que ser un poquito cuidadoso”, dijo hoy el Presidente. Advirtió que en muchas partes del mundo avanzaron con la liberación de actividades y luego “debieron volver atrás”.

“El plan es dosificar la salida, pero seguir controlando la epidemia”, agregó Fernández. Sabe que administrar un esquema flexible será mucho más complejo que regular un confinamiento generalizado. El Presidente advierte que no se trata de un “goteo”, sino de la “apertura de una llave” que no permite tener certezas sobre su efecto en la curva de casos.

“Estamos en un debate sobre cómo avanzar. Las salidas de las cuarentenas se convierten en un problema, por la naturaleza de la enfermedad y por la crisis económica que generó todo esto”, sostuvo Fernández.

El Gobierno debe ponderar en cada paso el factor sanitario y el económico. Por eso pretende comenzar la reactivación. “Nuestra expectativa es que mayo sea menos deficitario que abril”, resumió un colaborador oficial.

Fernández se refirió tangencialmente a la cuestión fiscal, cuando afirmó: “Dicen que están muy preocupados por el déficit, pero que el Estado se tiene que hacer cargo de todos los empleados. Bueno, pónganse de acuerdo. Si le pagamos a los empleados está claro que vamos a tener más déficit”.

En un mensaje a los empresarios, agregó: “Entendamos que es el Estado el que está pagando los sueldos y haciendo un aporte tan importante a sus trabajadores.

Fuente; la nación