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“El acuerdo con el FMI es para subsistir y llegar decorosamente al 2023, pero no mejora nada”

Para el economista, los problemas estructurales no se solucionarán. Estima que es un plan para transitar lo que resta hasta la próxima elección.

El economista, ex jefe de gabinete del ex ministro de Economía Roberto Lavagna y actual director de la consultora GRA y Asociados Gabriel Rubinstein, analizó el acuerdo anunciado por el Gobierno nacional y el FMI esta semana por la deuda de U$S45 mil millones e indicó que “es un acuerdo para subsistir, para darle un poquito de sobrevida al Gobierno y llegar al 2023 decorosamente”.

En diálogo con EL LIBERAL, Rubinstein sostuvo que “lo que se conoció hasta ahora es un programa donde hay una mínima reducción del déficit fiscal. Está prevista una fuerte reducción de la emisión monetaria, pero hay muchas dudas sobre ese punto, porque si no hay un gran financiamiento externo, es dudoso que haya un financiamiento interno tan amplio”.

Puntualizó en este sentido que “es peligroso una deuda que crezca tanto, es peligroso una deuda en pesos y además es muy difícil de lograr. Seguramente las metas de emisión monetaria a priori no se van a cumplir”.

El analista señaló no obstante que “aunque se desvíen de las metas, igual es un primer paso para que la inflación ceda un poco. Hay una inercia inflacionaria muy grande en estos momentos y venimos de una expansión monetaria enorme. Si se puede bajar fuerte el ritmo de emisión monetaria o bastante, eso seria bueno para que la inflación trate de no dispararse por encima del 50% y tienda hacia la zona del 40%. Se podría lograr, sería una manera de mantener las cosas más o menos como venían, sin cambios de nada”.

En cuanto a las medidas de control de déficit fiscal y de emisión monetaria que entrarían en el acuerdo, señaló que “es un mínimo control fiscal y monetario para subsistir. No remueve ninguna de las cuestiones argentinas que traban el crecimiento, no mejora prácticamente nada, es un acuerdo para ir tirando”.

No obstante, señaló que “es mejor esto que una explosión inflacionaria adicional o una crisis financiera adicional. Por ello creo que el acuerdo es positivo para eso, para darle un poquito de sobrevida al gobierno y llegar al 2023 decorosamente y después que venga un programa mejor, más ambicioso para bajar o eliminar la inflación, eliminar el déficit fiscal y eliminar la emisión monetaria y después con más reformas para que la Argentina pueda empezar a crecer en serio y no estos rebotes pospandémicos”.

Destacó que “desde el punto de vista económico es un acuerdo muy regular hasta donde se sabe, bastante mediocre, pero permitiría seguir con la mediocridad reinante”.