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Dos hermanas de 75 y 80 años pusieron en fuga a un depravado de 20 años que intentó violarlas

Violador en fuga. Así podría titularse este caso. La crónica policial dice que un joven de 20 años fue apresado ayer a la madrugada en San Pedro de Guasayán, mientras corría desnudo por un camino vecinal. Minutos antes había intentado abusar de dos hermanas de 75 y 80 años. Ingresó a su casa, las golpeó a trompadas y comenzó a exigirles que le practicasen sexo oral, o bien él las las accedería sexualmente. Pero no se salió con la suya porque las mujeres se defendieron y lo pusieron en fuga.

Las ancianas terminaron shockeadas y hospitalizadas en San Pedro de Guasayán, a 70 kilómetros al norte de la ciudad de Frías, por la ruta 157.

Las víctimas residen solas. Cerca de las 4 de la madrugada el aberrante sujeto empujó la puerta y en segundos se habría desnudado. Fuera de sí, comenzó a golpear a la de 75. De la peor manera les gritó que o le practicaban sexo oral o las violaba.

Terror dentro de casa

La de 80 intentó rescatar a su hermana, pero fue derribada al piso. Aterradas por el degenerado, las dos hermanas se hicieron fuertes y empezaron a golpearlo con un palo que fue lo primero que encontraron a mano. Fue tal el grado de furia de las mujeres, que el perverso se vio forzado a abandonar el negro cometido y saltó por una de las ventanas.

Para entonces, el griterío de las hermanas alertaron a los vecinos que pidieron socorro y el delincuente corrió desnudo hacia la oscuridad.

Diez minutos después, un patrullero lo sorprendió desnudo corriendo a 400 metros de la casa de las dos ancianas, quienes eran asistidas en su vivienda presas de un shock nervioso.

Imputaciones

“Lesiones” es el cargo dominante y anoche, la fiscal Dahiana Pérez Vicens indagaba sobre la otra calificativa: oscilaba entre “abuso sexual con acceso carnal en grado de tentativa”, o bien “abuso gravemente ultrajante”.

Luego que el atacante huyera, las hermanas fueron socorridas por los vecinos y la policía.

Al cierre, la fiscal las asistía con los médicos y psicólogos de la policía y el cuadro era más que obvio: aterradas por la pesadilla que debieron sortear.

Mientras tanto, esposado, fuera de si, y desnudo, el acusado fue cargado en un patrullero. Anoche, lo asistió un médico. Los funcionarios adelantaron que será indagado por Pérez Vicens este lunes o martes a más tardar en los tribunales frienses.