En los últimos estudios se pudo observar que la afección a los órganos, como corazón, riñón, pulmón y el sistema vascular, continúa presente después de la fase aguda de la enfermedad.
Desde que comenzó la pandemia por Covid-19, se vienen desarrollando diferentes estudios en la población para conocer los efectos a mediano y largo plazo que produce el virus en el organismo. Así, desde la Federación Argentina de Cardiología (FAC) informaron sobre las complicaciones que pueden presentar aquellas personas, aunque hubieran presentado una infección por Sars-CoV-2 con un curso leve o moderado.
“Estamos observando en los consultorios, y la evidencia científica de las últimas publicaciones también lo sostiene, que los efectos de la infección por Covid-19 pueden extenderse en algunos pacientes más allá de los 3 meses de haber tenido la enfermedad. Si bien las complicaciones son más frecuentes en quienes cursaron una forma más grave de la enfermedad, pueden incluso presentarse en aquellos con formas más leves o que no fueron hospitalizados”, asegura el Dr. Eduardo Perna, actual presidente de la FAC.
El Covid-19 puede afectar múltiples órganos durante la fase aguda de la enfermedad, y la evidencia publicada muestra daño a largo plazo en los pacientes con cuadros de infección más graves, sin embargo, faltan evidencias respecto del efecto a mediano y largo plazo en aquellos pacientes que no hubieran requerido hospitalización durante la enfermedad, lo que se corresponde habitualmente con más del 90% de la población infectada.
Recientemente se publicó un estudio en el European Heart Journal realizado en pacientes que ya tenían 9 meses de recuperación de cuadros leves a moderados del Covid-19. Se pudo observar que la afección a los órganos, como corazón, riñón, pulmón y el sistema vascular continúa presente después de la fase aguda de la enfermedad, estas condiciones se describen como post Covid-19 y, de acuerdo con la definición de la OMS, si los síntomas continúan más de 3 meses, como Covid prolongado. En estos casos es relevante la adecuada evaluación clínica, de laboratorio e imágenes complementarias para realizar el diagnóstico y tratamiento oportunos.
La evidencia muestra que luego del curso de la infección existe incremento del riesgo de accidente cerebrovascular, arritmias, inflamación del corazón como pericarditis o miocarditis, infarto de miocardio, insuficiencia cardíaca y trombosis.
En particular en este estudio, en la población que presentaba cuadros leves a moderados de infección por Sars-CoV-2 se observó una pequeña reducción del 1 al 2% de la fracción de eyección del ventrículo izquierdo, así como elevación de marcadores de daño miocárdico, lo que ha demostrado a largo plazo aumentar la mortalidad en la población general.