El gobierno del presidente Jair Bolsonaro negó que esos vuelos contribuyan a aumentar la capacidad militar británica. Sorpresa y quejas de la Embajada Argentina.
En un revés al reclamo planteado por el embajador argentino en Brasilia, Daniel Scioli, la cancillería de Jair Bolsonaro defendió la decisión de permitir que aviones militares británicos hagan escala en el territorio brasileño durante sus traslados a las Islas Malvinas.
Itamaraty, el ministerio de relaciones exteriores de Brasil, aseguró en una nota que “apoya los legítimos derechos de Argentina” en la disputa por la soberanía con Reino Unido, pero al mismo tiempo negó terminantemente que la autorización de aterrizaje de vuelos en el país contribuya con la “ampliación de los medios militares” de ese país en Malvinas.
Scioli había presentado el 31 de enero una nota en la que manifestó “preocupación” por el aumento significativo de vuelos militares de Reino Unido entre el territorio brasileño y las Islas Malvinas registrados en enero. El gobierno argentino detectó que entre el 4 y el 28 del mes pasado hubo un tráfico inusual de siete vuelos militares británicos que conectaron Malvinas y Brasil, y pidió que se restrinjan los vuelos hacia las islas.
Con el reclamo, que contó con el aval del canciller Santiago Cafiero, diplomáticos argentinos buscaban cerrar el camino para que eventualmente las autoridades británicas se amparen en el tráfico aéreo para dar legitimidad a la presencia militar en las Islas.
“La posición brasileña de autorización de sobrevuelo y aterrizaje de aeronaves brasileñas en la ruta a Malvinas se pauta por el principio de no contribuir a la modernización y a la ampliación de los medios militares británicos y del potencial bélico de Reino Unido en aquel archipiélago”, reza la nota de la cancillería de Bolsonaro que desestima la queja argentina.
Las autoridades brasileñas destacaron que todas las solicitudes de sobrevuelo y aterrizaje de aviones militares británicos en enero “fueron aprobadas en base al análisis individual” y citaron como justificativas “situaciones de emergencia, misiones de búsqueda y salvataje y motivos sanitarios o humanitarios”. El gobierno británico suele justificar el incremento en el número de vuelos debido a la misión antártica.
Fuentes de la embajada argentina en Brasilia recibieron con sorpresa la respuesta de Itamaraty, hecha pública mediante la divulgación de una nota de la asesoría de comunicación de dicho organismo. Entrada la noche del martes, Itamaraty no había hecho oficial ninguna respuesta a la embajada en Brasilia que conduce Daniel Scioli ni tampoco al Palacio San Martín en Buenos Aires, según aseguraron fuentes diplomáticas.
“Una desprolijidad”, lamentó un alto diplomático argentino. La embajada argentina en Brasil esperaba una notificación para las primeras horas del miércoles.
Las autoridades británicas suelen justificar el incremento de vuelos en ésta época del año debido a tareas de la misión Antártica, algo que diplomáticos argentinos sospechan que podría ser usado como pantalla.
La cancillería de Bolsonaro, por último, relativizó la cantidad de vuelos en enero como motivo de queja, citando que el número puede variar significativamente de año a año. “Hubo años en que las autorizaciones llegaron a 150 (vuelos) mientras que en otros ese número fue de apenas 1 (vuelo)”, cierra la nota.