El tema en los últimos años ha generado la investigación a diferentes niveles. Se han descubierto en Estados Unidos chicos con síntomas de síndrome de Tourette, pero sin el componente genético de esta condición.
El contenido de salud mental en línea resulta una interesante fuente de información que muchas personas la consideran confiable. Sin embargo la utilización en exceso de ese contenido genera un entorno complejo dada la ausencia de contexto y el intercambio/búsqueda de referencias.
Específicamente, en la red Tik-Tok, se ha comprobado la aparición en los últimos años de personas, generalmente adolescentes, con severos trastornos debido al consumo excesivo de este tipo de contenido sin ningún filtro. La velocidad a la que incorpora el contenido, resta capacidad de raciocinio y crea nocivos hábitos de adicción y dependencia.
La psicóloga local, licenciada Emily Azar, reveló que estudios recientes realizados en Estados Unidos hablan de la aparición de chicos con síntomas de síndrome de Tourette, pero que no presentan el componente genético de esta condición, por lo que los investigadores dedujeron que es por el excesivo uso de Tik-Tok, y alertó que ese trastorno está avanzando a otros países.
“Tik Tok a nivel de salud mental está muy estudiado, porque si bien se habla de todo, no se censura nada, se producen procesos identificatorios con las publicaciones. Ubica al consumidor en un lugar pasivo, solamente tiene que mirar, a velocidades rapidísimas y eso implica que tenga poco tiempo para pensar”, graficó Azar.
Agregó que, al no poder parar de mirar los contenidos, “lo que sucede es que se reduce el control inhibitorio; la atención no es voluntaria, y los videos tienen tanto contenido que llevan a que uno atienda pero de manera pasiva”.
“Se ha observado en estudios sobre la atención que los chicos que usaban Tik-Tok en exceso, que tienen problemas de atención, incluso cinco años después, hablando de consumidores básicos”, puntualizó.