El presidente Alberto Fernández encabezó la delegación argentina que dio los primeros saludos protocolares al flamante mandatario brasileño, Luiz Inácio Lula da SIlva, en el Salón Noble del Palacio del Planalto, la Casa de Gobierno de Brasil.
La asistencia de Fernández a la toma de mando de Lula marca para la Casa Rosada un hecho de gran relevancia en su política exterior no sólo por el modo en que gravita en la estratégica relación bilateral con el principal socio comercial de la Argentina, sino también por la relevancia que tiene para el futuro de la integración regional.
El presidente de Argentina estuvo acompañado en el saludo protocolar por el canciller Santiago Cafiero y el embajador en Brasilia, Daniel Scioli.
El presidente Alberto Fernández participó de la asunción de Luiz Inácio Lula da Silva a la primera magistratura en Brasil, en lo que constituirá uno de los puntos centrales de la agenda internacional del Gobierno nacional para 2023.
Ambas naciones tienen además una relación estratégica en cuestiones nucleares, de seguridad regional y proyección hacia el Atlántico Sur, la Antártida y la Cuenca del Paraná y el Río de la Plata.
Argentina es el tercer socio comercial de Brasil (detrás de China y los Estados Unidos) y principal socio del Mercosur.
Lula y Fernández mantendrán este lunes una reunión bilateral en el Palacio de Itamaraty, toda vez que el brasileño prometió viajar a Argentina el 24 de enero a la cumbre de la Celac que se realizará en Buenos Aires, donde pretende también realizar una visita de Estado.