Según el relevamiento, por primera vez en el año hubo un leve repunte.
Por primera vez en más de un año, el consumo masivo en Argentina mostró una variación positiva: en abril, registró una suba interanual del 0,1%, según el relevamiento mensual de la consultora Scentia, que analiza tickets emitidos por comercios de todo el país. Aunque el incremento es marginal y aún pasible de revisión, el dato quiebra una racha de 15 meses consecutivos de caídas, lo que marca un cambio de tendencia en un contexto de fuerte ajuste económico.
El informe destaca que el impulso provino principalmente de los autoservicios, donde las ventas aumentaron un 3,1%, mientras que los supermercados continuaron en baja, aunque con una desaceleración: la caída fue del 2,9%. Esta diferencia se acentuó en la comparación territorial: en el AMBA, los autoservicios crecieron un 6,7% y los súper cayeron un 4,5%; en el interior del país, los autoservicios subieron 1,2% y los supermercados retrocedieron 1,3%.
Por rubros, “alimentación” fue el único que mostró un alza significativa, con un 4%. En contraste, las bebidas sin alcohol cayeron 9,3% y las alcohólicas bajaron 8,5%. En lo que va del año, el consumo acumula una retracción del 6,5%, en línea con el deterioro del poder adquisitivo y la inflación, aunque el precio promedio ponderado se mantuvo en torno al 38% interanual. Desde el Gobierno, en otras oportunidades se habían cuestionado estas estadísticas, señalando que los cambios en los hábitos de compra afectan su precisión