“Es muy difícil despedir a un amigo. Todo este conjunto de medios llora su partida. Se podría hablar mucho de la vida empresarial del exitoso empresario que ha sido, al crear no sé cuántas empresas que hoy dan trabajo a más de cuatro mil santiagueños que hemos encontrado en esas empresas el respaldo de siempre, absolutamente en blanco, sin que haya ni un empleado en negro. Para el doctor Ick, el cumplimiento de la ley, como abogado exitoso que era irrenunciable”.
“Siempre fue mi amigo. Hace treinta años me convocó a su escritorio cuando todavía era un periodista deportivo para conducir Libertad de Opinión”.
“Ese hombre sensible y generoso, llevó a cabo una actividad que no sólo enriqueció la cultura de Santiago sino que también tuvo una fuerte acción social para aquellos que más lo necesitan, conducidas por él en silencio, lo hacía por su sensibilidad de hombre de bien. El Dr. Ick fue un hombre de familia, aferrado a suesposa, a sus hijos y a sus nietos, a los que amó profundamente.
Se ha ido un gran hombre, sensible, generoso, emprendedor como pocos”.